17 de marzo – Jerall, así ha dicho Sandra que llaman a su hija en casa, una joven mujer de 23 años que hoy habla llena de esperanza sobre lo que puede ser el futuro, optimista, creyente, orgullosa de su familia y con un vínculo muy cercano con su mamá, la mujer que le enseñó a arriesgarse, perseguir sus sueños y tener fe.
El último año de la vida escolar de Jeralldine Hernández Herrera, estuvo marcado por una de sus primeras experiencias cercanas con el liderazgo, sus compañeros de plantel la eligieron como personera estudiantil, tal vez refrendando la determinación con la que había afrontado 8 años como bailadora de joropo en diferentes escenarios, de cierta manera esto demostraba que representar los anhelos propios y grupales ya hacían parte de su vida, algo que generó confianza y le entregó nuevas herramientas para afrontar con responsabilidad el peso extra que trae salir del colegio.
Ya en esa nueva realidad, no salía de la mente de Jerall la idea de continuar sus estudios, soñaba con ser médico, con abrirle nuevas oportunidades a su familia, ser la primer profesional en su hogar, sin embargo y como quedaba en evidencia en conversaciones de casa, el dinero era importante, ir a la universidad requería de inversión, algo difícil para el momento económico de la familia. “No quería que mi hija se frustrara, la invitaba siempre a pensar en que ya llegaría el momento, en orar y creer en Dios”.
Pasó todo un año, ya algunos de sus compañeros del colegio estaban viviendo su vida universitaria, otros empezando este ciclo, eran momentos en los que se necesitaba tranquilidad, confianza y visión para identificar las oportunidades. “Escuchamos de una convocatoria que estaba realizando la empresa GeoPark, decían que iban a becar a mujeres del área de influencia de sus operaciones en carreras universitarias a fines al sector, al principio dudé, pensé que ese tipo de procesos se los terminaban ganando los hijos de sus empleados, gente influyente o con recomendaciones políticas, pero decidí intentarlo y escribí en una cartulina: YO ME VOY A GANAR LA BECA, todos los días lo leía para convencerme que lo lograría”.
Una tarde, Jeralldine y su mamá estaban solas en casa, el teléfono sonó y al otro lado de la línea estaba por ser entregada la noticia, ya existian los resultados de todo el proceso de convocatoria, entrevistas y filtros, GeoPark, se haría cargo de sus estudios universitarios en la universidad que eligieran y acompañamiento permanente en cada etapa del proceso. “Con mi mamá nos abrazamos, lloramos, dimos gracias a Dios, no lo podíamos creer, pero la respuesta no era distinta a Dios, fue su voluntad y finalmente podría empezar la primera etapa de un sueño personal y familiar” – Nos cuenta Jerall con la voz afectada por la emociones que le producen revivir ese momento.
Los sueños profesionales tomaron rumbo a Bogotá y de acuerdo con el relato entregado por la becada, los primeros meses de su vida en la capital no fue fácil, allí no conocía a nadie, no tenía familia, sin embargo encontró en Victoría Ferrero, líder del programa en GeoPark, a una mujer que estuvo presente, motivando, respaldando y siendo voz de respaldo cuando más fue importante.
Después de 5 años, el pasado mes de diciembre Jeralldine presentó su proyecto final de grado y recibió una de las mejores noticias que ha tenido en la vida, hay fecha, el próximo 21 de marzo en la universidad Jorge Tadeo Lozano de la ciudad de Bogotá, será entregado el título que acredita que valió la pena cada experiencia y momentos complejos. “Estoy contando los días, desde que recibí la noticia del grado, me he sentido una mujer orgullosa de mí misma, siento que estoy logrando algo importante para mi familia, seré la primer profesional en mi hogar y haré feliz a mis padres y a mi hermano”.
Al concluir esta historia que tendrá otra página en 12 días, vale la pena recordar a Sandra Herrera, esa mujer de la que Jeralldine se siente orgullosa, la que la ha inspirado junto a su padre a salir adelante y a quien hoy pude escuchar en medio de lágrimas, lo inmensamente emocionada que está presenciar el momento cuando llamen a recibir el diploma a la Ingeniera Química. Jeralldine Hernández Herrera.